Los vecinos autoconvocados de Gonzalez Catán siguen organizándose para pedir el cierre definitivo del CEAMSE
El Ceamse es un enorme basural que afecta a la población con problemas de salud (respiratorios, circulatorios, cáncer, etc.) y través de la Secretaría de Política Ambiental de Bs As, se ha determinado que "el agua químicamente y biológicamente NO ES APTA PARA CONSUMO HUMANO”, el basural tiene efectos directos en la población, pero no es una problemática únicamente de los vecinos de Gonzalez Catán, afecta a todo el Partido de La Matanza, y a todos los barrios ya que la salud ambiental no se encuentra en las agendas del gobierno.
El pasado domingo, de acuerdo a lo que relataron los vecinos de la localidad de Catán, en horas de la tarde se divisó una nueva columna de humo tóxico generada por explosiones seguidas de un incendio en el relleno sanitario.
En tanto, un grupo de vecinos se acercó a las puertas del basural y, allí, aseguraron que no divisaron la llegada de los bomberos. “Ya no vienen cuando se incinera porque pasa muy seguido.
Los vecinos autoconvocados funcionan de forma independiente, libre, autogestiva y autónoma de los gobiernos y las empresas y se reúnen en asamblea en la plaza de Gonzalez Catan y están organizando para el viernes 9 de febrero un festival y movilización a las 18.30, concentrándose en la plaza de Catan, para marchar hasta la puerta del CEAMSE.
La historia del CEAMSE de la Matanza no es algo nuevo sino que tiene sus años, surgió durante la dictadura militar y se mantuvo inmutable a lo largo de los 30 años. El 3 de noviembre del 2006 miles de vecinos cansados por la desidia y la contaminación realizaron un bloqueo de 4 días que fue reprimido por la policía bonaerense, que además detuvo a varios vecinos que fueron liberados gracias a las movilizaciones que se realizaron para que los suelten. Luego de semejante gesta se consiguió que el municipio de la matanza dejara de recibir basura de otros municipios y de capital federal, a partir de ese día en la CEAMSE de Catan sólo se enterraría basura de La Matanza y todo lo demás se comenzó a enterrar en el basural del Camino del Buen Ayre en el partido de San Martin.
Las empresas multinacionales y de residuos, se dedicaron a comprar lealtades entre los vecinos más afectados o simplemente amenazaron de muerte a aquellos que no se resignaban a morir envenenados por la contaminación, como trascendió con el caso de Susana Aranda.
El debate es muy profundo, y las medidas a tomar para solucionar este tema es fácil si asi lo quisiera el estado, hay precedentes de plantas ecológicas para tratar la basura, municipios que separan los residuos, etc. La solución no es depositar la basura en otro lado tirándole el problema a otros barrios, hay decisiones políticas claras de seguir manteniendo el CEAMSE en Catán, y una falta de concientización acerca de nuestros propios residuos. La tarea es titánica, pero imprescindible.