Apuradas, como si estuviésemos poniéndonos la armadura para salir a dar batalla, nos pintamos de violeta la cara, nos calzamos nuestros pañuelos verdes y salimos a marchar. Los alaridos feministas son cada vez mas fuertes y seguidos, mas intensos, mas mujeres se suman a ese grito que nos hermana. Nuestras voces comienzan a salir, de cualquier manera, cuanto mas desafinadas más se escuchan, así que como salga esta bien, porque no queremos cantar como princesas o como Britney Spears, queremos cantar fuerte para que se escuche, que si nos organizamos el patriarcado llora, que no fue magia que una mujer sea la conducción de un proceso que le dio de comer a millones de argentinxs que antes no tenían posibilidad de futuro alguno, que se escuche que tenemos los ovarios que le faltan a la CGT, que se escuche que si Macri sigue recortando las políticas de género lo vamos a ir a buscar, que se escuche que ACÁ NO SE RINDE NADIE. 

La jornada fue soñada, muy organizada, la marcha avanzaba, nosotras cantábamos, nuestros compañeros acompañaban, algunas estalladas de emoción, orgullosas por haberle parado por segunda vez al macrismo, porque este paro haya sido internacional, que mujeres de Palestina, de Brasil, de Honduras hayan formado parte es increíble y habla de que entendemos que el camino es unidas, lesbianas, travestis, mujeres, juntas en la lucha feminista, que es la verdadera profundizadora de cualquier proceso revolucionario. No estamos solas, y no estamos alejadas, somos todas hermanas, hijas de una Juana Azurduy que con su lanza de mujer marco el rumbo de las que salimos a pelear por la parte del mundo que nos corresponde. 

Y luego entre tantos sueños, la represión, el gas pimienta y aproximadamente 30 compañeras detenidas por ser mujeres, muchas estaban en la parada de colectivo de camino a casa, otras interviniendo mientras le pegaban a unxs pibxs.

La policía mata pibes, reprime a los trabajadores y trabajadoras, tranza con los fiolos, tranza con los narcotraficantes, manda a nuestros pibes a robar y libera zonas para que prostituyan a nuestras pibas ¿y nosotras somos las vándalas? ¿nosotras somos unas delincuentes por pintar paredes? Todavía me sorprende, que todos se fijen mas en la pared que lo que dice en ella. Los medios son de los monopolios y las paredes del pueblo, que eso nunca se nos olvide, las mujeres TAMBIÉN somos el pueblo y por eso, el 11 de marzo replicamos esta marcha en el Partido de La Matanza, diferentes organizaciones políticas nos encontramos para marchar desde Arieta y Ruta 3 hasta la plaza de San Justo.

Una mujer es asesinada por violencia de género cada cuatro días en la provincia de Buenos Aires, según datos estadísticos obtenidos por la Procuración General Bonaerense durante todo 2016, período en el cual también se iniciaron más de 95.000 causas penales por violencia familiar o de género, casi un 40 por ciento más que el 2015. La Gobernadora Vidal recorta el presupuesto destinado a las políticas de género, y en nuestro partido, los casos de violencia aumentan ininterrumpidamente. Por esto mismo nos organizamos, nos reunimos, sociabilizamos información y experiencias. Porque esto es lo que quiere el patriarcado, hacernos creer que estamos solas y que somos débiles, pero más de una vez le demostramos que nuestro poder es inmenso, y llegó el momento de demostrarlo otra vez.